Intento recordar. Busco el punto en el que comencé a intentar abrir la puerta
Creo que fue un punto de inflexión natural
Cuando la rueda de la vida te coloca abajo,
o se para,
o continua hacia arriba
con los ojos vendados me tropecé hasta que me caí
Creo que comencé a abrirla después de un gran golpe
pienso cuál de todos fue y recuerdo que fue de esos que son los que más duelen:
los del amor
no me importaba no ser feliz mientras tuviera la razón
hasta que preferí lo contrario
cuando estaba dentro de mi caverna no veía más que sombras
pero la caída hizo una gran grieta en mi duro caparazón
entonces comenzó a entrar un poco de luz
son más duros los golpes del amor para un yo egoísta
se arroja contra alguien que le sirva de espejo de sí mismo
o de ojos del mundo
pero cuando no se mira no se ve
se lanza sin puntería ni dirección
No pude echar a mi ego a patadas porque a patadas me lo devolvieron
Primero se repuso
y luego le indiqué la salida
le expliqué el camino de ida
y también de vuelta